Es muy probable que cuando nos hablen de Jujuy nos imaginemos la típica imagen del cerro colorido, cactus, llamas y aguayos. La imágenes más difundidas de la provincia pertenecen a paisajes de La Quebrada de Humahuaca, que cobró gran popularidad desde que fue declarada Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad por la UNESCO en el año 2003.
De hecho, si buscamos «Jujuy» en Google images, de las 10 primeras fotos que nos muestra, 6 son del Cerro de 7 colores de Purmamarca y 4 son de las serranías del Hornocal. Pero Jujuy tiene mucho, muchísimo más que ofrecer además de la Quebrada (sin sacarle crédito, claro).
Geográficamente la provincia está dividia en 4 regiones conforme a sus clima, relieve, flora y fauna: los valles, las yungas, la quebrada y la puna. En cada una de estas regiones encontraremos paisajes y atractivos turísticos muy diversos, que pasan por todos los relieves, climas, culturas, gastronomía y ¡colores!.
La época del año en que hagamos nuestra visita también influye en sus paisajes y por lo tanto en nuestra percepción. En invierno encontraremos temperaturas de -15ºC en la puna, mientras que en las yungas rondan los 14ºC. Durante el verano las temperaturas son más agradables y los paisajes más verdes, peeeero es temporada de lluvias, con lo cual no solo nos tocarán días de lluvia, sino que posiblemente haya dificultades para acceder a algunos destinos por la crecida de ríos que estan secos durante el resto del año.
Pasen a un recorrido por las regiones de jujuy, desde arriba hacia abajo.
Puna es una palabra de origen quechua y en español significa «tierra elevada y fría». En esta región vas a estar cerca del cielo, con alturas que pueden superar los 5.000 msnm. Es probable que al principio padezcas el llamado «mal de altura» o puna, pero con los días el cuerpo suele adaptarse. Mientras tanto, siempre tendrás a mano unas hojas, caramelos o té de coca.
Aquí es muy común la formación de lagunas, como la de Pozuelos y la de Guayatatoc, y salares, como las Salinas Grandes.
La Ruta 40 y la Ruta 9 son las principales vías de acceso a la región. Por la ruta 40 podemos acceder al Valle de Marte, las Lagunas de Vilama, Susques, Volcán, Termas de Tuzgle, entre otros destinos. Y por la Ruta 9 a Cochinoca, el cerro El Huancar (donde se puede practicar sandboard ;)), Yavi y Yavi Chico. A La Quiaca, frontera con Bolivia, se puede llegar por ambas rutas.
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El clima puneño es muy riguroso. Así que si creías que en el norte hace calor y sólo tenés preparadas remeras y pantalones cortos, es momento de empezar a empacar camperas y prendas térmicas. Quizás durante el día, sientas el calor del sol puneño, pero por la noche agradecerás tener un abrigo a mano. Esto se debe a las grandes amplitudes térmicas típicas del altiplano. Tiene temperaturas entre 25ºC de máxima durante el día y -10ºC de mínima durante la noche y la madrugada. También es un clima muy, muuuuuy, muuuuuuuuuuy seco.
En cuanto a la fauna podrás ver (¿o quizás comer?), llamas, ovejas y cabras por doquier. También vicuñas, suris y cóndores, un poco más dificiles de encontrar por ser animales silvestres.
La vegetación es muy variada, pero NO HAY CACTUS, como casi todos pensamos. Se compone generalmente por arbustos. Además hay tolas, especies de arbustos bajos, tolilla, añagua, rica-rica, suriyanta, queñoa, etc. Muchos de ellos usados para fines medicinales o simplemente para tomar un rico mate.
Como mencionamos anteriormente, la Quebrada de Humahuaca es la famosa de la familia. Fue nombrada Patrimonio cultural y natural de la humanidad por la UNESCO en el año 2003 por su importancia cultural e histórica, sus atracciones turísticas, paisajes y sitios arqueológicos.
Históricamente sirvió de ruta a los Incas. Fue paso obligado de expedicionarios y colonizadores y una importante ruta comercial en la etapa virreinal. Ha funcionado, hasta hoy, como permanente vía de interacción, vinculando territorios y culturas distantes.
Geográficamente, como su nombre lo indica, es una quebrada (no me digas!). Es algo así como una amplia grieta rodeada por montañas. Tiene un marcado rumbo norte-sur que la ruta 9 recorre desde Volcán hasta Tres Cruces, paralela al Rio Grande, el rey de «la grieta». Las altitud va desde 500 a 4000 msnm… así que posiblemente también necesites de la milenaria hoja de coca (hay otras opciones, ya lo veremos). A lo largo de la la ruta 9 podemos encontrar múltiples pueblos para recorrer. Todos son hermosos pero como siempre, hay algunos más populares que otros, entre los que podemos destacar Purmamarca, Maimará, Tilcara y Humahuaca.
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El clima es un poco más amigable que el de la puna. Las amplitudes térmicas también son típicas de la región. Puede hacer mucho calor durante el día y mucho frío durante la noche y la mañana. Una vez más, siempre tener abrigo a mano.
¿Y hay cactus? ¡SI! por doquier y de toda clase. A diferencia de la puna, la quebrada es mucho más verde, sobre todo durante el verano. Hay vegetación muy variada, de hecho es zona de cultivo de hortalizas, maiz, haba, cebolla, zanahoria, durazno, manzana, etc. Al haber muchos productores locales es posible que encontremos buenos precios en los mercados de frutas y verduras en comparación a otros lugares.
A medida que bajamos nos vamos poniendo más verdes, más cálidos y más húmedos. Así que si no tenés los labios partidos, ¡felicitaciones!, estás en los valles o en las yungas. Ya no necesitás hidratarlos… pero ¡ojo!, tenés que protegerte de los mosquitos.
La zona de los valles ocupan la región centro-sur de la provincia. Aquí encontraremos vertientes de aguas calientes y frías, lagunas, diques y paisajes verdes y frondosos. Una enorme franja de altas montañas encierra el valle de Jujuy, que está surcado por abundantes cursos de agua y cubierto por bosques. Las alturas van de los 500 a 2.000 msnm. El clima es templado durante casi todo el año, aunque puede haber nevadas ocasionales en el invierno. Si, en Jujuy nieva.
La ruta 9 también es la principal vía de comunicación de esta zona. Algunos de los destinos que más destacan son El Parque Provincial Potrero de Yala, las Termas de Reyes, Tiraxi y los diques La Ciénaga y Las Maderas.
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En esta región se encuentra también la flamante capital de la provincia, San Salvador de Jujuy. Si venis recorriendo los distintos pueblos, seguramente te resultará muy contrastante la vorágine de la ciudad de San Salvador comparada a los pueblos de las regiones que venimos mencionando.
Y ahora si, llegamos a la última región por describir y nos teñimos completamente de verde.
Las Yungas se encuentras en el este de la provincia. Se caracterizan por la presencia de selvas de montaña o “nuboselvas”. Tienen una gran variedad de ambientes que conforman diferentes pisos de vegetación. La altitud va desde los 400 hasta más de 3.000 msnm. Hay más de 200 especies de árboles, 80 variedades de helechos, 100 especies de mamíferos, 500 de aves y más de 30 de anfibios. También conviven diferentes grupos culturales, siendo uno de los de mayor multiplicidad étnica de la Argentina; y hogar de los grupos kollas, chané, guaraní, ocloyas y wichis, entre otros. Aquí encontraremos pueblos que conviven como comunidad. Las Yungas son consideradas como uno de los ambientes con mas alta biodiversidad de Argentina, junto a la Selva Paranaense.
No es fácil moverse por esta región, sobre todo si la visitás en época de lluvias. Las calles son mayormente de tierra y suelen cubrirse de barro, y la oferta de transporte público es algo limitada. Pero no es para desistir, si te gusta el turismo aventura y el eco turismo, este es el lugar indicado.
Dentro de este paraíso natural se encuentran la Reserva de Biosfera de las Yungas, que alberga el Parque Nacional Calilegua, y pueblos hermosos como Valle Colorado, Valle Grande y San Francisco.
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El clima es subtropical, cuenta con registros máximos de 40°C en verano, oscilando las medias entre 28°C y 15°C en invierno. Pero a pesar de estas temperaturas no es recomendable que te calces los pantalones cortos y las ojotas. Lo mejor es llevar ropa clara y liviana, pero que cubra el cuerpo. ¿Por el sol?, no, de hecho seguramente tengas más sombra que cualquier otra región. Es importante cubrirse el cuerpo por la vegetación y… por los insectos. Y esta es una aclaración muy importante… NO es un lugar apto para entomofóbicos o similares. En las yungas hay muchos, MUCHOS insectos.